Wednesday, June 20, 2007

LOS DESALOJOS FORZADOS, OTRA FORMA DE EXCLUSION SOCIAL




“Acaba con la basura”. Ese era el lema de un proyecto impulsado por el Gobierno de Zimbabwe que, hace dos años, pretendía echar de sus casas a 700.000 personas que vivían en barrios marginales. La medida, promovida por el presidente Mugabe, llevó a la comunidad internacional a interrogarse sobre el papel del mandatario y llevó a una movilización local muy importante que pedía el fin de las demoliciones de viviendas y un plan que beneficiaría a las familias mas pobres

Los desalojos ocurridos en Zimbabwe no son un hecho aislado. En los últimos tres años, la agencia de Naciones Unidas UN-Habitat ha documentado decenas de casos que le llevan a afirmar que este tipo de exclusión social ha aumentado en todo el mundo “de manera dramática, en frecuencia, en número y en su nivel de violencia”

Según UN-Habitat, los desalojos forzados “parecen haberse convertido en una práctica común en lugar de la planificación urbana sostenible”, tanto en los países del Norte como en el Sur, y han significado la movilización de muchas organizaciones locales.

Así, en Kenia, donde mas de dos millones de personas viven en asentamientos informales sólo en la ciudad de Nairobi, la presión de la población obligó al Gobierno a detener una campaña de dasalojos que preveía desplazar a 300.000 personas para construir autopistas y líneas ferroviarias y eléctricas. En Francia, 50.000 personas con escasos recursos estaban amenazadas con ser desalojados de sus viviendas por no poder pagar el alquiler y la sociedad civil respondió a esta situación con concentraciones de protesta, ocupaciones de viviendas e impulsando una campaña entre los ayuntamientos para que se declarasen territorios “libres de desalojos”

Para paliar esta situación, la ALIANZA INTERNACIONAL DE HABITANTES, en el marco de UN-Habitat, puso en marcha hace tres años Cero Desalojos, una campaña que pretende aglutinar iniciativas locales para una vivienda digna y crear un sistema de alerta internacional desde el que denunciar estas prácticas
Como explican desde esta iniciativa, en teoría, para el año 2015 debería disminuir hasta los 100 millones de números de personas sin hogar o que viven en infraviviendas en el mundo, pero la realidad es que la cifra aumentará hasta los 700 millones en 2020. Y la mayoría de afectados serán mujeres, niños y personas mayores sin recursos

Las causas de los desalojos, señala la campaña Cero Desalojos, son varias: desde construcción de carreteras, hasta líneas ferroviarias que pasan justo por un barrio marginal y la construcción de un edificio de servicios o de locales turísticos y comerciales

La mayoría de estos proyectos son “financiados por los países ricos, el FMI o el Banco Mundial en los países pobres” y “raramente” atienden necesidades básicas de la población local

En África, Asia y América Latina, dice la iniciativa Desalojo Cero, muchas familias pueden quedarse sin casa tras “la ofensiva, conducida por el FMI y el Banco Mundial, que quiere imponer las privatizaciones como condición para la concesión de los préstamos”

“Si la Unión Europea aprueba la “Directiva Bolkestein” sobre la liberalización de los servicios, alrededor de 18 millones de familias que actualmente viven en casas populares pasarían a un régimen privado”, mientras que en Estados Unidos los recortes en el sector de la vivienda social “aumentan la precariedad habitacional de las clases populares”, señalan desde UN-Habitat, que destaca la “estrecha” vinculación entre las privatizaciones y el aumento de la inseguridad de tener o no un techo

Las personas que son desalojadas, además, no suelen ser compensadas por perder sus casas y propiedades y no tienen otro lugar al que marcharse. En Pekín, por ejemplo, un millón y medio de personas podrían encontrarse en esta situación, según el Centro de Derechos de la Vivienda y contra los Desalojos (COHRE), el Gobierno los quiere desalojar para realizar las obras que necesita para los Juegos Olímpicos.

Fuente: Canal Solidario