Thursday, January 24, 2008

Isidro Macías, "padre patera"


El único español que figura entre los 22 ciudadanos europeos considerados "héroes" de la solidaridad y el trabajo desinteresado en favor de la sociedad por la edición europea del semanario estadounidense "Time" es un religioso. Se trata del franciscano de la Cruz Blanca Isidoro Macías, conocido como "Padre Patera", aunque no es sacerdote, por su labor de acogida a inmigrantes, principalmente mujeres africanas embarazadas o con niños pequeños, que cruzan el Estrecho de Gibraltar de forma ilegal.

La lista de los héroes europeos, que según la prestigiosa publicación han realizado cambios en la sociedad o en la vida de los demás, incluye también, entre otros, a los futbolistas David Beckham y Zinedine Zidane, la escritora británica J. K. Rowling, el fiscal italiano Stefano Dambruoso, el cirujano palestino Hhalad Abu Ajamia, las modelos y estrellas del pop suecas Graaf Sisters, y el sacerdote belga Leonard van Baelen, uno de los pioneros en el desarrollo del denominado comercio justo del café para dar esperanzas al pueblo de Congo.

En declaraciones a la Agencia IVICON, Isidoro Macías señaló que se sentía contento por este reconocimiento, al aclarar que con la mención de la revista se valoraba, más que su trabajo personal, la labor social de la Iglesia, en cuyo seno son muchos los que trabajan de forma anónima y desinteresada, a favor de los emigrantes y marginados. "Me alegro no por mí sino por la Iglesia, que en otras ocasiones aparece criticada en los medios de comunicación; esta vez la Iglesia ha aparecido para bien, a través de mi persona, en una publicación", dijo el religioso franciscano.

AVALANCHA DE PATERAS

Nacido en la localidad onubense de Minas de San Telmo el 31 de enero de 1945, Isidoro Macías conoció en Ceuta, mientras realizaba el servicio militar en 1967, a Isidoro Lezcano Guerra, jefe del servicio de Meteorología de la ciudad, que realiza una intensa actividad caritativa en favor de los pobres. Ambos profesaron como Obreros de Cruz Blanca en 1973 y dos años más tarde, el Jueves Santo de 1975, fueron aprobados como instituto religioso de derecho diocesano por el entonces obispo de Tánger, el franciscano Carlos Amigo Vallejo, actualmente arzobispo de Sevilla, que los llamó Franciscanos de Cruz Blanca.

Desde 1967, Macías ha trabajado durante doce años en Tánger, acogiendo a españoles que no podían venir a España por motivos políticos y atendiendo también a ciudadanos marroquíes. Posteriormente, ha estado siete años en Cáceres en un colegio de Educación Especial, y desde 1982 reside en Algeciras, donde comenzó recogiendo a ancianos sin hogar que vivían en la calle y a ciudadanos africanos que pernoctaban en el puerto. El religioso franciscano apareció por primera vez en los medios de comunicación cuando en el verano de 2000, al comienzo de la avalancha de pateras que cruzaban el Estrecho, acogió a los emigrantes africanos que llegaban a las costas de Tarifa, especialmente a mujeres subsaharianas embarazadas o con niños de pocos meses, por lo que recibió el apelativo de "padre patera".

TRES PROGRAMAS

En la actualidad, los Franciscanos de Cruz Blanca desarrollan en Algeciras un triple programa de atención a las necesidades de alojamiento, manutención y cuidado de personas mayores en la casa familiar Virgen de la Palma; atención a mujeres inmigrantes que llegan en pateras embarazadas o acompañadas de sus hijos, a las que proporcionan alojamiento y alimentación para ellas y sus bebés, así como acompañamiento a los servicios sociales y sanitarios, junto a la información y orientación sobre las opciones y posibilidades para legalizar su situación; y atención urgente a transeúntes y desplazados, a los que facilitan ropa limpia y aseo, además de comida, alojamiento temporal y desplazamiento a sus lugares de destino final.

En un folleto informativo de la congregación, los Hermanos Franciscanos de Cruz Blanca reconocen que su labor en la ciudad de Algeciras en las últimas décadas "ha ido evolucionando progresivamente, consiguiendo una integración con los problemas sociales que afectan a los sectores más desfavorecidos de nuestro entorno". Respecto del centro de atención a personas marginadas sin hogar, que acoge a transeúntes e inmigrantes, los religiosos manifiestan que trabajan "en un contacto directo con los servicios sociales del Ayuntamiento para tramitar las demandas que se reciben por esta vía, bien directamente o bien a través de las fuerzas del orden".

Desde hace unos meses, las obras de construcción de una casa para acogida de mujeres inmigrantes que llegan en pateras, que se ha comenzado a edificar junto a la casa de ancianos en el Paseo de la Conferencia, frente al puerto de Algeciras, están paralizadas por falta de medios económicos. Actualmente, diecisiete africanas (de las más de 130 acogidas por el hermano Isidoro entre junio de 2000 y abril de 2003), la mayoría nigerianas, residen en dos casas contiguas de planta baja junto con sus hijos, cerca de la residencia de la comunidad religiosa y la casa de acogida a veintidós hombres sin familia y sin hogar, aunque el deseo del "padre patera" es ver acabado cuanto antes el edificio destinado a ellas para tener todas las personas acogidas juntas.

PERFIL BIOGRÁFICO

A continuación trascribimos la traducción del original en inglés del perfil biográfico que la corresponsal de la revista "Time" en España, Jane Walker, ha escrito sobre Isidoro Macías, el único español que aparece entre los 22 ciudadanos europeos a los que considera héroes:

Cada semana docenas de inmigrantes africanos arriesgan su vida para llegar al sur de España en pequeños botes conocidos como "pateras". Algunas naufragan, y muchos otros son repatriados a Marruecos, probablemente intentarán regresar de nuevo. Los que llegan a la orilla son normalmente desamparados y tienen que afrontar un futuro precario como inmigrantes ilegales tratando de buscar caminos para encontrar trabajo en Europa.

Un numero sorprendente de mujeres inmigrantes llegan embarazadas; parece ser que con el mito de que si una mujer da a luz a un bebe en España, éste obtendrá la nacionalidad española. Isidoro Macías, fraile franciscano de 57 años de edad, es conocido como "padre pateras" porque alimenta, viste y hospeda al mismo tiempo a 25 mujeres y bebés; también tiene como tarea comunicar a estas mujeres que han sido engañadas. En Tánger, en los años 70, Macías abrió un centro para el cuidado de chavales con incapacidades, el centro funciona hasta el día de hoy.

"Los padres de estos chavales no pueden mantenerlos y normalmente los abandonan", dice Macías, que cuando vio en 1982 la situación de trafico de inmigrantes ilegales en el estrecho de Gibraltar comprendió que sus necesidades eran realmente grandes. Macías dirige dos centros de acogida en Algeciras, uno para madres africanas y sus bebes, y otro para mujeres y hombres ancianos y sin hogar. El "padre pateras" recibe una pequeña subvención anual de 120,000 euros de las autoridades locales para el cuidado de los ancianos, pero depende de donaciones para mantener la madres y sus bebes. "Nuestra misión es cuidar de la gente que no tiene nada", asegura.

El trabajo que el "padre pateras" está haciendo va contra la ley española que prohíbe el recibir inmigrantes. Pero la policía no le molesta (cierran un ojo). "La policía normalmente nos trae niños que están solos y nosotros supuestamente tenemos que entregarlos para la repatriación después de que los hemos cuidado y alimentado. Pero yo odio hacer esto", dice el "padre pateras". "Yo creo que nosotros estamos haciendo la voluntad de Dios, y ¿quien puede cuestionar la ley de Dios? Si alguien viene en busca de acogida, desde luego nosotros se la brindamos", añade.